Dejáme Marzo tu divina blancura
tu neblina intangible.
Cuando la luz despierte
entre tus cavernas,
dejála que entre.Para que vea como los hilos
del sol nadan en tus lagunas
y una canción se cuela
entre los ecos de tus penumbras,
dibujando la silueta
de tus mudas estalactitas.
Imagen: "Aire y tiempo" by N. Zacarías